¿Qué tres grandes consejos para aprender idiomas nos enseña la famosa aplicación Duolingo?
Sergio Moya es maestro en el Aula de Educación de Personas Adultas de Alcaraz desde 2009 |
Duolingo es actualmente una de las apps más famosas para aprender idiomas en el mundo entero. Su popularidad es enorme entre aprendices de todas las edades independientemente de su edad y de su nivel de competencia en el idioma que desea aprender. Actualmente es considerada la plataforma mundial más grande del mundo para aprender idiomas y una prueba de ello es el número de usuarios que la utilizan: ¡200 millones de personas!. Fue elegida mejor app del año 2013 para los usuarios de Apple y tuvo el mismo reconocimiento entre los usuarios de Google Play ese mismo año.
Gran parte del éxito de esta aplicación reside en dos características: un enfoque gamificado en el aprendizaje de un idioma y que es absolutamente gratuito. La segunda razón no es más importante que la primera. La gamificación está cada vez más asentada en la pedagogía y en la didáctica en general y que, a grandes rasgos, puede resumirse al viejo adagio pedagógico de aprender jugando. Con Duolingo, el usuario pasa fases como si de un videojuego se tratara y, de manera indirecta, adquiere el aprendizaje. A estos dos elementos hay que sumarle un tercer elemento no menos importante: un atractivo y sencillo interfaz fruto de un acertado trabajo de diseño.
El sentido de este artículo es animar a todos nuestros alumnos de las aulas de adultos para que hagan uso de esta aplicación y que aprendan de las conclusiones que recientemente han publicado BurrSettles y Masato Hagiwara, dos desarrolladores de Duolingo e ingenieros especialistas en e-learning y campos de lingüística y ciencia cognitiva. Según estos especialistas, hay tres hábitos que comparten los buenos aprendices de idiomas tras analizar el big data que una aplicación tan masivamente utilizada puede aportar. La aplicación les aportó datos sobre los estudiantes, su regularidad de estudio, su cantidad aportada al estudio, los resultados porcentuales según cada perfil, etc. No se trata, pues de opiniones, sino de conclusiones extraídas de los propios números. Y podemos, además, señalar que son conclusiones exportables a otros campos de aprendizaje: desde tocar el piano, dibujar con maestría o hacer volar un avión.
Una de las primeras recomendaciones que se dan es que aquellos que pretendan ponerse en forma en dos semanas o perder peso de una manera fugaz están abocados al fracaso. No existe atajo ni vías rápidas sino la aplicación de la idea clásica: practice makes perfect. En base a este principio, estos son los tres hábitos para tener éxito en el aprendizaje de idiomas:
Primera conclusión : estudiar los fines de semana o de uvas a peras no funciona
Según estos investigadores, uno de los factores que mejor predicen un éxito en el aprendizaje de una lengua extranjera ( y de cualquier disciplina, básicamente) es estudiar con una regularidad diaria. Como podemos ver en la gráfica 1, los estudiantes que se disciplinan a estudiar la lengua con una regularidad de unos minutos al día o cada dos días tienden a tener más éxito a largo plazo. En cambio, los estudiantes que estudian cada 5 o 6 días tienen muchas más probabilidades de abandonar el estudio y, en consecuencia, fracasar en su intento de aprendizaje. Es importante resaltar que esta primera conclusión no resalta muchas horas de estudios diarias o semanales sino poca cantidad temporal de estudio pero con una regularidad y constancia diaria.
Además, los desarrolladores crearon perfiles para identificar a cada tipo de estudiante y su patrón de estudio:
- Weekenders ( aquellos que sólo usaban Duolingo los fines de semana).
- Nine-to-Fivers ( aquellos que sólo usaban Duolingo en horas de trabajo).
- Daily (aquellos que estudian de manera diaria)
- Daily At Bedtime ( Aquellos que estudian justo antes de irse a la cama)
La figura 2 muestra claramente que aquellos estudiantes en los dos primeros perfiles muestran un rendimiento mucho menor en el aprendizaje de la lengua. El rendimiento es medido por la superación de las fases del juego y que, por supuesto, entrañan el conocimiento de la lengua. El estudio comparativo se basa en análisis psicométricos o IRT. Uno de los aspectos más a destacar de este estudio es la influencia positiva que el sueño ( y, especialmente, estudiar lenguas extranjeras en los minutos previos al sueño) tienen en el aprendizaje de las lenguas extranjeras. No lo olvides: lee y escucha inglés antes de que te de sueño.
Segunda conclusión: No empolles como un burro a última hora
Otro hábito de aquellos estudiantes con éxito que lograron avanzar con Duolingo es que no se daban festines de estudio de 5 o 6 horas un día y lo dejaban seis. Los estudiantes que progresaban mostraban que se conectaban a la aplicación y estudiaban desarrollando una distribución del hábito de estudio con sesiones cortas de estudio durante un periodo más largo de tiempo. Es decir, tal y como muestra la figura 4 los estudiantes con éxito estudiaban poca cantidad de tiempo pero con una regularidad diaria frente a atiborrarse a estudiar de manera aleatoria.
Tercera Conclusión:
Muchos estudiantes, independientemente de la disciplina que estudien, tienen la tentación de estudiar material nuevo una vez que se cansan del ya, a priori, aprendido. Sin embargo, es una tentación que puede llevar a un detrimento en el aprendizaje. Toda persona que estudia lenguas extranjeras sabe que aquello aprendido se olvida con el tiempo y mucho más cuando no existe una necesidad donde aplicar lo aprendido (por ejemplo: un estudiante de inglés en un pueblo de la sierra de Albacete con pocos habitantes o personas con las que practiquen el idioma que quiere aprender). Más de un siglo de literatura psicopedagógica demuestran que se olvida menos aquello que es revisado con frecuencia. Así que, no lo olvides: repasa lo aprendido.
Sergio Moya García
Aula de Alcaraz